Los Suaves somos todos - Regreso a la escena del rock

Regreso a la escena del rock

Artículo escrito por Juan Luis Ibarretxe Marcos

02/06/2013: Me parece haber oído en cierta ocasión que los asesinos
siempre regresan a la escena del crimen. Como a mí no me gustan ni los crímenes
ni ningún tipo de violencia, prefiero hablar de un regreso a la escena del rock
que se puede entender en sus diversas expresiones. Así las cosas, nos
encontramos con pabellones como el de La Casilla, salas de conciertos como el
mítico Antzoki, el Azkena y la Rock Star (cuyo futuro, por desgracia, parece un
poco negro) o plazas de pueblos en los que cada verano se puede saborear buena
música en forma de conciertos gratuitos y a las que año tras año retornamos
ansiosos de “dar caña” a los oídos.

Parece que hoy en día lo procedente sería repasar la “Gira
de los Mil Conciertos” de nuestros queridos Suaves o el próximo Derrame Rock,
en el que gozaremos con “Los Suaves somos todos”, la reunión (¡¡ya tengo hotel,
yujuuu!!), pero lo cierto es que hoy me apetece hablar de lo que podríamos
denominar “Santurtziko Jaiak, retorno a la ciudad de las sardinas”, en referencia
al concierto que se ofrecerá allí el 19 de julio. Bien es cierto que podría mentar
otras muchas localidades vizcaínas en las que ha tocado la banda del gato,
varias de ellas en la misma Margen Izquierda del Nervión (Barakaldo o mi
querido Sestao, sin ir más lejos), pero he de admitir que el pueblo portuario
merece una mención especial.

Allí, hace casi dos décadas, en concreto el 14 de julio
de 1994, con motivo también de las famosas fiestas de El Carmen, Los Suaves ofrecieron
un concierto que se quedará en mi memoria, no sólo por el apartado musical, si
no también por el estilográfico. Y es que ese día, acompañado de una serie de
amigos, algunos de los cuales continúan siguiendo al grupo gallego allá donde van
(caso del gran Javinho), conseguimos que todos sus miembros nos firmaran una camiseta
de Los Suaves que poco antes nos habían regalado al mencionado Javi, a su
colega Iñigo y a mí en un viaje organizado a Santander, donde vimos en directo
a Barricada.

Camiseta firmada el 14 de julio de 1994 en Santurtzi (espalda)

Poco podíamos imaginar que apenas mes y medio más tarde,
todos los integrantes de nuestro admirado quinteto iban a estampar su nombre en
estas camisetas que aún conservamos. El ilusionante momento llegó bastante antes
de que arrancara el concierto, de hecho, todavía era de día y, aunque parezca poco
verídico, hasta hizo buen tiempo (sin alardes, que había nubes, pero se estaba
a gusto). Entonces, Charly, Montxo, Alberto y Gelo fueron los que accedieron a nuestras
peticiones de firma, pero a Yosi no le veíamos por ningún lado.

No obstante, como buenos fanáticos que aún no habían
alcanzado la veintena, nos mantuvimos allí, pegados a unas vallas desde las que
divisábamos el autobús de Los Suaves y del que, al de un rato, bajó el propio
Yosi. Ante nuestra llamada, el vocalista, que por entonces tenía una melena
rizada negra; sin los insultos del tiempo que él dice que representan las
canas, se acercó a nosotros y también firmó, completando así el repóquer de
autógrafos.

Delantera de la camiseta (la firma de Yosi está en el ángulo superior izquierdo en rojo, casi borrada)

Ahora, 19 años más tarde, y aunque el escenario se ubique
en un espacio diferente, a escasos doscientos metros de donde descargaron en
aquel 1994, tendré la oportunidad de rememorar cómo un día cinco rockeros de
los auténticos, de los que llevan chupa de cuero por principios y no por moda,
me hicieron feliz. Es cierto que en este periodo de tiempo, todos hemos
cambiado, hasta los miembros de Los Suaves y yo mismo, pero al igual que el
asesino regresa a la escena del crimen, el día 19, la banda y un servidor
regresaremos a Santurtzi para confirmar que Ezkerraldea, Bizkaia y Euskadi entera
son rockeras.

P.D.: Fíjense si han cambiado las cosas, que en 1994 había que
ir en tren a Santurtzi y ahora llega hasta allí el metro. En Galdakao, sin
embargo, seguimos aislados a la espera del ansiado suburbano.

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